Choque de trenes.

Un día más me animo a salir en bici con la sana intención de dar pedales y evitar en lo posible coger esos kilos que tanto me cuesta quitar. Últimamente entre semana suelo salir por carretera un par de días aunque sea tan solo para hacer los 40 kilómetros que hay entre ida y vuelta hasta el alto de Sarasola, este miércoles tenía otros planes, sin otro afán que dar una vuelta de aproximadamente hora y media me prepare y me marque como destino el vivero, zona que conocéis perfectamente y que bajo mi punto de vista es perfecta para rodar y hacer kilómetros sin grandes desniveles, lo mas parecido a hacer carretera pero en el monte.

Eso es todo lo que os puedo contar del recorrido y sensaciones de esta salida en bici ya que como por arte de magia el siguiente recuerdo que tengo es estar en una cama del Hospital de Galdakao con mi mujer a los pies de la cama. ¡¡¡ Impactante verdad!!!

Pues bien, al parecer en algún punto del recorrido choque frontalmente con otro biker y como resultado quede conmocionado, al parecer no perdí el conocimiento pero todos los recuerdos de este percance mi cerebro a decido borrarlos.

Con muy buen criterio y aunque parecía que estaba bien Jon Ander el biker contra el que choque, decidió acompañarme hasta el ambulatorio de Basauri para que me reconociesen, aquí me atendieron y tras llamar a mi mujer me llevaron en ambulancia hasta el hospital de Galdakao. Tras diversas pruebas en las que descartaron cualquier tipo de daño cerebral  me dejaron en observación hasta ayer al mediodía.

Ayer a la tarde me llamo Jon Ander para ver que tal estaba, y me contó que es lo que había pasado, al parecer el encontronazo nos lo dimos en el tramo de pista que sale a la izquierda según subes por la carretera de Galdakao al antiguo parque de atracciones, ya sabéis la famosa subida al Vivero de Igor Anton en la vuelta. Es una zona en la que en ambos sentidos se rueda bastante rápido así que el golpe aunque seco tal y como me ha contado Jon Ander tuvo que ser brutal. Al parecer golpee mi mandíbula con su hombro y de ahí que quedase conmocionado como un boxeador, el a su vez tiene un buen golpe en el hombro y sigue un tratamiento antiinflamatorio.

Quiero agradecer a Jon Ander toda la ayuda y atención que me presto ya que tuvo la suficiente habilidad para detectar que aunque consciente mi estado no era normal.

Gracias Jon Ander

Un saludo

Josean